Hace ya un tiempo, comentando en un grupo de amigas, me enseñaron que existen unos objetos monísimos, con los que los pequeñajos de la casa siguen ilusionados y creyentes en el Ratoncito Pérez.
Porque, seamos realistas, ahora de adultos nanai, pasamos del tema. Pero, echando la vista atrás, ¿recuerdas qué sensación?... Saber que se te movía un diente era lo más. "Fardar" delante de tus amigos, moviéndolo con la lengua, a sabiendas de que cualquier día tendrías la maravillosa visita del roedor más molón (y con ese apellido que lo hacía tan español, jijiji)
Y por fin llegaba el día, se caía el dichoso diente, a pesar de los tirones que les dabas, llegaban a tardar días (jobar). Esa noche, yo era incapáz de dormir, (o eso creía), con la ilusión de pensar qué iba a traerme a cambio de ese diente brillante que tanto me había esforzado en limpiar.
No recuerdo cuándo fue, pero pronto perdí la ilusión. Supongo que fue cosa de mi estimada hermana, que con casi tres años más que yo, se encargaba de contarme la verdad y bajarme al mundo real. Ains!
Para nosotros es pronto, mi cachorrito tiene solamente Ya? año y medio!!! Pero sí que hemos podido vivirlo en las carnes de una amiguita, explicarle todo el "trámite" de dejar el diente debajo de la almohada, pero debes estar bien dormida, si te ve despierta se ira asustado, pobre ratón!, y empiezan las preguntas. Qué haríamos si Einstein (el gato de la familia) se come al ratón??¿?¿?... Su cara de preocupación e ilusión lo decía todo...
Bien, aquí os dejo unas puertas chulísimas, con las que seguir alimentando la ilusión de vuestros pequeños. Cuándo las vi me encantaron, fíjate, tienen unos detalles diminutos y muy reales.
Estas puertas se colocan en cualquier punto de la casa, donde tú quieras, y llegado el día D, llega el ratoncito Pérez a través de ella, para poder recoger el diente y dejar el regalito al pequeño.
Dejad volar la imaginación de los cachorros, no tiene límites!, y os sorprenderán.
Seguro que hay muchisimas webs donde encontrar estas puertas tan chulas. Yo os dejo aquí una pequeña selección, por si queréis echar un vistazo. El precio de las puertas que he visto oscila entre los 20 y los 40 euros. Y casi todas ellas se pueden personalizar con detalles muy "cuquis", como diría mi amiga Cristina.. Ji ji ji
Por supuesto, hay otras formas de dejarle los dientes al Sr. Pérez, si eres mañosa no te costará nada.
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